El plátano es una fruta popular que ha sido parte esencial de la dieta humana durante siglos. Celebrado mundialmente por sus propiedades, tales como el potasio, magnesio, ácido fólico y fósforo, el plátano no solo es sabroso, sino que también es una fuente de energía y nutrientes para todos, desde niños hasta ancianos y deportistas.
Aunque es una fruta fácil de transportar y consumir, a veces, cuando madura demasiado y adquiere tonos marrones, puede terminar siendo descartada. ¡Pero no tiene que ser así! A continuación, te presentamos cinco maneras exquisitas de usar esos plátanos maduros y garantizar que no se desperdicien:
¿Por qué congelar los plátanos maduros?
Cuando los plátanos comienzan a madurar en exceso y presentan una apariencia no muy atractiva en su exterior, congelarlos es una excelente opción para mantener intactas sus cualidades nutritivas. Resultan ideales para elaborar helados hechos en casa, ya que aportan la dulzura necesaria para estos postres sin tener que incorporar azúcar o algún otro endulzante.
¿Cómo almacenar plátanos maduros en el congelador?
Para congelar adecuadamente los plátanos en su punto máximo de madurez, simplemente quítales la piel y guárdalos enteros en un recipiente hermético o en una bolsa especial para congelación. Al momento de querer usarlos, simplemente apriétalos un poco con las manos para que se rompan en pedacitos, facilitando así el trabajo de la licuadora al preparar deliciosos helados saludables.
Maduros fritos: Corta los plátanos en rodajas y fríelos en aceite caliente hasta que tomen un color dorado. Son perfectos como acompañante en platos salados o como postre, acompañados de queso y un chorrito de miel.
Puré de plátano: Cocina los plátanos hasta que estén blandos, lo que generalmente toma unos cinco minutos. Luego, con la ayuda de un tenedor, aplástalos para obtener un puré. Un poco de mantequilla y una pizca de sal intensificarán su sabor.
Batido de plátano: Los batidos son formas versátiles de aprovechar la fruta. Combina plátanos maduros con leche y una pizca de canela. La cantidad de leche variará según tu preferencia de consistencia.
Banana bread: Los amantes de la repostería apreciarán esta opción. Utiliza plátanos maduros para crear un bizcocho esponjoso y delicioso, agregando ingredientes como mantequilla, azúcar, huevos, harina de trigo, levadura y, para los que deseen un toque extra, nueces. Aquí te dejamos la explicación de como puedes hacer una Banana Bread
Galletas de avena y plátano: Estas galletas no solo son deliciosas, sino también saludables. Combina plátanos maduros con copos de avena y hornea. Sin azúcares ni harinas añadidas, son una opción saludable para el snack de la tarde.
Recomendaciones para conservar los plátanos:
- Mantén los plátanos lejos de la exposición directa al sol y a temperatura ambiente. Reserva el frigorífico para cuando estén excesivamente maduros. Investigaciones actuales indican que ciertas enzimas del plátano pueden alterarse o desactivarse si se exponen a temperaturas inferiores a 10ºC.
- Evita apilar los plátanos en el cesto de frutas. La presión de los plátanos superiores puede provocar que los que están debajo retengan más humedad y, por ende, maduren más rápidamente. Como alternativa, considera colgarlos usando un soporte o estructura adecuada.
- Una vez que alcanzan un alto grado de madurez, es recomendable trasladarlos al refrigerador o, mejor aún, congelarlos, como suelo hacer yo, pensando en futuros helados. Si optas por no congelarlos, guárdalos en un recipiente hermético. A pesar de las posibles manchas exteriores, ¡por dentro estarán en excelente estado!
- Evita colocar plátanos junto a otras frutas. Los plátanos emiten un gas conocido como etileno, que no solo provoca que se ablanden y sus almidones se transformen en azúcares, sino que también acelera la maduración de otras frutas cercanas.